¿Qué dinosaurio de 'Jurassic Park' eres tú?

Eres de los que son más felices cuando llaman la atención, y estás dispuesto a ser tan ácido o ruidoso como sea necesario para conseguirlo. Puedes parecer inofensivo, pero letal si te lo propones y, extrañamente, muchos se sienten atraidos por tus peculiares cualidades.

Te preocupas e interesas por los demás porque sabes trabajar en equipo, y te gusta hacerlo. Eres leal a tu manada y muchas veces piensas en el bien común antes que en el tuyo. Sin embargo, a veces tiendes a actuar solamente de la forma en que otros lo hagan.

Tienes una gran personalidad, que fascina y arrasa. Muchas veces te perciben como el gran villano del cuento, pero en realidad sólo eres firme en tus convicciones y lucharás por defenderlas. Disfrutas, con facilidad, tanto de estar solo como de rodearte de tu selecto grupo más cercano.

Eres un alma libre, que disfruta de vivir el momento sin ataduras, ni compromisos. Te gusta sentir que tienes el control de las situaciones y te aterra la vida rutinaria. Buscas expandir tus horizontes y abrir tus alas, aunque siempre sabes dónde está tu verdadero hogar.

Eres astuto, determinado y, a veces, un poco manipulador. Conoces perfectamente lo que te conviente, lo que te gusta y lo que necesitas. Una vez que te has determinado una meta, la persigues hasta dominarla. A pesar de tu naturaleza agresiva, logras convivir con quienes consideras que están a tu altura.

Si te pudieran describir en una palabra sería amable. Puede que no todos sean capaces de verlo, pero tienes un espíritu noble, protector y pacífico. Hay momentos en los que prefieres resguardar tus emociones, pero cuando abres tus sentimientos, te desbordas por completo.

Tal vez algunos crean que eres una de las personas más inocentes sobre la faz de la Tierra, pero tu "frágil" exterior esconde un alma calculadora y fría que aprovecha la mejor ocasión para lograr tus propósitos. No temes huir si algo no te parece seguro porque sabes que siempre habrá alguien para cubrir tu espalda.

Sueles vivir a la defensiva, intentando que los demás sólo perciban tu lado más duro y feroz. Con frecuencia te encuentras alardeando de tu grandeza, aunque lo haces para cubrir tus inseguridades y soledad. Tu actitud, generalmente arrogante, terminará por alejar a todos de ti.