Caminando, llegué a la entrada de una cueva enorme, la cual admiré estupefacto. Advertí que se habían presentado ante mí dos emociones: temor y deseo. Temor de la cueva oscura y deseo de ver si podía descubrir algo grandioso".

Leonardo da Vinci

El genio solía caminar por los bosques en busca de nuevos descubrimientos. Su curiosidad lo llevaba a explorar los terrenos más desolados y tenebrosos. Los temas variados de su arte, eran un reflejo de su curiosidad por el mundo.