¿Emperador o Templanza?
¿Emperador o Templanza?
El propósito del test es adentrarte en el autoconocimiento del arquetipo del emperador y de la templanza del tarot, el resultado no es concluyente. Para conocer más ingresa a la sección actividades de nuestra página www.karpayglobal.com/agenda y descargar la presentación del curso Metarot compartido por Felipe Zapata.
El propósito del test es adentrarte en el autoconocimiento del arquetipo del emperador y de la templanza del tarot, el resultado no es concluyente. Para conocer más ingresa a la sección actividades de nuestra página www.karpayglobal.com/agenda y descargar la presentación del curso Metarot compartido por Felipe Zapata.

Suelo pensar mucho para tomar decisiones.
Soy muy bondadoso con los otros.
Atraigo con facilidad el dinero para mis proyectos o sueños.
Tengo hábitos saludables en mi vida.
El emperador
El emperador
Conoces el arquetipo del emperador y llevas su energía. Su inteligencia y trabajo fuerte le ayudan a conseguir la estabilidad en su mundo material y establecer un orden. Sin embargo, si activas dentro de ti el arquetipo de la templanza, puedas escuchar tu cuerpo y lo que sientes también, y verás cómo tu sentir mueve el universo, el maravilloso caos, para crear las sincronías necesarias para que todo fluya con más facilidad hacia a ti.
El emperador y la templanza
El emperador y la templanza
Tienes integrados ambos arquetipos. Reconoces que lo sutil y lo denso están unidos. Tu mundo material está ordenado y tranquilo, porque has cultivado hábitos saludables y has escuchado tu cuerpo más allá de tu razón, confiando en que todo va a fluir y que con voluntad harás los movimientos justos y necesarios para llegar a lo que quieres a través de las sincronías.
Templanza
Templanza
Tienes integrado el arquetipo de la templanza. Reconoces lo que sientes más allá de la razón, y sabes que tu espíritu aporta una protección natural en cada momento de la vida material cuando dejamos todo fluir. Sin embargo, despertar el arquetipo del Emperador en ti, permitirá conciliar el aparente opuesto entre la materia y el espíritu, y con prosperidad darle expresión material a eso que te propones, y no se convierta eso que decretas en tu vida en simples ilusiones.