NotiPerro: Cuidado con la lluvia

Descubre cómo mantener a salvo de las precipitaciones a las mascotas y evitar que impidan salir a pasear.

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Elegir 20 jun 2019

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Durante la temporada de lluvias, los perros no están exentos de riesgos, en particular por posibles complicaciones de salud y el miedo a los truenos.

Conoce algunas recomendaciones para proteger a los canes en esta época y evitar que se interrumpan sus paseos diarios.

Alista un sitio seguro

Si el perro duerme en el exterior, debe contar con un alojamiento seco, donde su cama o cobijas no estén expuestas al agua ni a la humedad, pues este sitio será su refugio.

Sécalo

Los perros pueden enfriarse rápido si su pelaje y patas permanecen mojadas, situación que los pone en peligro de contraer enfermedades e incluso infecciones de la piel. Si se moja, hay que secarlo por completo para prevenir complicaciones.

Evita que beba de charcos

Cuando un can bebe agua sucia y estancada de un charco, puede ingerir bacterias que se alojan en los riñones. Por lo tanto, se debe evitar que beba de esta fuente. Su bebedero tiene que contar con agua limpia para que la tome con seguridad. Mediante la desparasitación también se pueden prevenir enfermedades.

Vacúnalo

Ante el peligro de enfermarse o infectarse por la interacción con el ambiente, una manera de prevenir complicaciones es mantener las defensas de las mascotas altas. Para ello, necesita estar al corriente con su esquema de vacunación, según las indicaciones de un médico veterinario.

Cuídalo de los truenos

Los truenos y relámpagos generan estrés para algunos perros. Es evidente porque se esconden, gimen, ladran, rascan y hasta se orinan. La ansiedad provocada por este miedo debe tratarse, pues suele ser más severa conforme avanza la edad.

¿Cómo tratar el miedo a los truenos?

Los perros con miedo a los truenos suelen ponerse ansiosos antes de que comience a tronar. La lluvia y los destellos intensos de luz pueden desencadenar esta reacción.
Para tratar esta fobia, no se tiene que castigar al can por estar ansioso, pues de esta manera tendrá más miedo y ansiedad al asociar el trueno con el castigo.
Tampoco hay que acariciarlo demasiado porque así se exacerba el problema, dado que aprenderá que su conducta ansiosa es agradable para sus dueños.
Se debe proporcionar un lugar seguro al perro donde pueda refugiarse mientras pasan los truenos. En general, ellos eligen sitios como debajo de la cama o de una silla. Si no tiene este lugar, hay que animarlo a ir a uno mediante comida o golosinas que disfrute.
La mascota debe insensibilizarse al sonido del trueno y a los estímulos asociados a él. Este proceso gradual requiere que se acostumbre al sonido y lo perciba como normal. Para hacerlo, se puede reproducir el sonido de un trueno a un volumen bajo, en intervalos cortos y de forma irregular.
Cuando se escuche el sonido, los dueños deben distraer al perro con juegos o actividades. Si el perro está demasiado asustado para participar, hay que reducir el volumen e internarlo de nuevo. Este proceso requiere mucha paciencia.

¿Cómo pasear si está lloviendo?

Los perros pueden mantener su rutina de paseos diarios y de salir para ir al baño durante la temporada de precipitaciones. Algunos incluso disfrutan jugar en la lluvia y mojarse.

Para pasear con un perro en los días lluviosos sigue estos consejos:

Las salidas tienen que ser más cortas y menos activas. Para que no resienta la falta de ejercicio, se recomienda quemar energía antes de salir con juegos en casa.

Cúbrelo con un impermeable que proteja su cuerpo y cabeza. Esta prenda no debe dificultar sus movimientos.

Usa siempre correa para evitar que escape si escucha truenos, que beba agua de charcos o que camine por zonas lodosas.

Al volver a casa, sécalo por completo con una toalla o con secadora si su pelaje es abundante. También hay que cepillarlo.

¡Mucho ojo!

Las razas más afectadas por la humedad son las de pelo largo o con pliegues en la piel, pues guardan humedad y su piel se irrita.
Si un perro se rasca a menudo con la boca, las uñas o contra alguna pared, puede hacerse daño y provocarse infecciones por hongos o bacterias.
Otro señales de alerta son la presencia abundante de moco cristalino, tos, lagaña de color amarillo o verde y elevación de temperatura.
Ante cualquier síntoma de alarma, se recomienda consultar a un médico veterinario.

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Edición: Tonatiúh Rubín
Fuentes: Eukanuba, Hill's y Host a Pet

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