"La ley del espejo"conócela y aplícala

Básicamente, afirma que el mundo exterior actúa como un espejo y lo que ese espejo refleja, no es más que nuestra propia luz y nuestra propia sombra, es decir, nuestro mundo interior.

Una vez que hemos entendido e interiorizado esta ley, la forma de ver la vida cambia. Te das cuenta que no eres víctima de nadie y de nada, solo de ti mismo.

Nos damos cuenta que nuestros problemas se convierten en fuente de aprendizaje y que esas emociones que alguien afuera despierta, se convierten en motivación para sanar algo que no se ha sanado todavía; o para permitir hacer algo que nosotros mismos no nos permitimos hacer.

Algunas cosas que nos molestan de los demás, son cosas que probablemente nos molesten de nosotros mismos.

Una vez que comprendemos todo esto, nuestro mundo exterior se transforma.

Como se menciona anteriormente, esta ley ayudará al autoconocimiento, a ser más conciente de lo inconsciente y a descubrir y liberarte de tu propia sombra, dejando atrás todo aquello que te genera sufrimiento.

Cuando algo de alguien nos moleste, hagamos una pausa, e imaginémonos un espejo delante de nosotros, justo en la cara de la persona.

Haz la siguiente pregunta:

Normalmente, estos sucesos generarán alguna de estas situaciones, el trabajo personal consiste en averiguar cuál de estas 4 situaciones es:

Esto que tanto molesta, no es más que un reflejo de algunas cosas que molestan de ti mismo, esta mostrando algo que no queremos ver dentro de nosotros mismos, un lado oscuro nunca antes visto.
Lo mejor que se puede hacer, es aceptar esa parte de ti y sanar lo que necesites sanar.

El espejo te demuestra algo contrario a lo que se es en realidad y por eso nos molestamos al ver el lado opuesto en los demás. Por ejemplo: Si eres muy generoso, te molestará que alguien sea tacaño.

Esto quiere decir que estás situado en un extremo de la vida, y por ende estás haciendo mal. La vida no es color blanco o negro, la vida es de muchos colores y posee distintas tonalidades de cada uno de ellos.

El trabajo personal en este caso, es buscar un punto medio donde encuentres la homeostasis entre cada uno de los extremos.

En esta situación, el espejo refleja alguna conducta sobre ti que no necesariamente la tienes hacia esa persona que la está aplicando, pero si se hace con otras.
Esta situación puede verse reflejada en cualquier ámbito. Por ejemplo: alguien en el trabajo está aprovechándose de tu persona, empiezas a pensar que es injusto porque tú no estás haciendo lo mismo con él... resultado empiezas a aplicar lo mismo a otra persona.
En este caso, tendremos que salirnos de la posición en la que estamos, y mirar más en macro la situación, tomar conciencia de ello y transformarlo.

El espejo en este caso, reflejará tus expectativas con alguien y la realidad de ella.
Lo que molesta en esta situación es que los demás no sean como nosotros esparábamos que fueran sin aceptar como ellos son en realidad.
El aprendizaje en esta situación es aceptar a las personas y dejar de querer que cambien.

Una de las más grandes moralejas es que esas personas que nos hicieron sentir molestos, frustrados, que simplemente despiertan nuestro lado más negativo, son las mismas personas que se convertirán en tus maestros de crecimiento.

Si tú no cambias, nada cambia.

Utiliza la información del exterior para transformar tu interior y verás que habrá un resultado positivo.

Con información de https://youtu.be/_AHLcpFHMSE
Por Ariana Haggar | Culturizando