El fenómeno descrito como "nacimiento de ataúd", supone la salida del útero materno de un niño no nacido, expulsado pos los gases de la descomposición del cuerpo de su madre. Esto es lo que habría sucedido en el caso de una tumba hallada en la ciudad de Imola, Italia, en donde fueron descubiertos los restos óseos de una mujer, datados con 1300 años de antigüedad, y los de su bebé.
Los arqueólogos de la Universidad de Ferrara y de la Universidad de Bolonia se dedicaron a estudiar este caso, en el que la madre murió por una trepanación del cráneo y su hijo fue expulsado del útero por los gases póstumos. Los expertos señalaron que la trepanación practicada a la mujer era una técnica de cirugía habitual durante el Medioevo, y consistía en la perforación de un agujero en el cráneo para aliviar la presión.
