Las 10 portadas de discos más incómodas de la historia

Un pequeño toque moderno, la siempre controvertida Minaj no tuvo empacho en lucir su cuerpo de forma tan sensual, que la disquera tuvo que colocar un cuadro negro en su trasero para promocionar su single

De forma literal, se lo tomó la cantante de soul Millie J. en volver al sanitario para encontrar sus raíces musicales, su propuesta causó más risa que enojo

La foto de una púber causó revuelo al conocerse que el efecto cristal en el centro de su intimidad representaba la pérdida de la virginidad

La imagen de Eddie acuchillando a la primer ministro Margaret Tatcher no contó con aprobación unánime, años más tarde el concepto se repitió en otro disco y no hubo censura

El gran Ziggy causó revuelo por combinar su cuerpo con el de un perro, exhibiendo al aire libre los designios de la naturaleza

Un caso demasiado rigorista. El grupo tuvo que cambiar la imagen porque el concepto de un niño sin ropa apelaba a la pederastía

Respuesta audaz, en su tiempo, para protestar contra el abuso de animales salvajes.

La imagen de un hombre con pantalones entallados no resultó tan problemático, excepto en España, cuyos principios gubernamentales no podían tolerar semejante protuberancia en contra de la pureza

Para ser un álbum bastante tranquilo, nos seguimos preguntando ¿qué diantres quisieron decir los melenudos de Liverpool con esto?

Abiertamente gay (no todos los miembros lo eran), la portada refleja un ambiente de paz y camaradería, algunas voces rechazaron su imagen de extrema comunión entre hombres